Imperio Esmeralda

Participantes: Agasha Numiko y cualquier personaje que quiera visitar a Agasha Takeru en este momento

Agasha Numiko

Una samuraiko no debería sentirlo, pero me llenaba de satisfacción no solo haber cumplido la misión que mi clan me había encomendado, sino cumplir las expectativas de Takeru- sama. Forzando un rostro neutro, entré en la primera sala del templo de Takeru- sama para ver si estaba disponible.

Los guardias de la puerta de la Magistratura Esmeralda te saludaron al entrar. Después de todo Agasha Takeru era respetado en todo el Imperio como erudito y hombre de ciencia, propietario de una afilada mente analítica. Un sirviente con la librea del Crisantemo te llevó hasta el despacho del magistrado, al fondo de un retorcido pasillo, el cual mostraba en sus paredes adornos que simulaban una especie de Jardín de la Historia Agasha. Tras ser anunciada, el criado abrió la puerta a la habitación, dominada por una mesa baja llena de documentos en un orden caótico.

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Me encontraba mirando el jardín zen del exterior. A continuación me giré y pasé a dirigirla toda mi atención.

-Saludos, Agasha Numiko-san. Me congratula veros de nuevo. Sentaos, por favor. ¿Sake, té?

Después de examinar varios de los adornos de las paredes, llego ante la presencia de Takeru- sama.

- No, gracias, Agasha Takeru- sama. -digo después de realizar una amplia reverencia y sentarme. Siguiendo la tradición, esperé a que Takeru- sama decidiera preguntarme sobre mi visita, a pesar de que el reporte debía hacerlo yo. Inconscientemente, me fijé en si él prefería tomar sake o té.

Dejé la tetera a un lado, para que no se calentase demasiado por si al final mi invitada cambiaba de opinión. Me recogí un poco las amplias mangas de mi kimono, útiles para el frío del exterior pero muy incómodas para rellenar informes. Pasaba más tiempo evitando que se mancharan de tinta que en mis trabajos.

-Bien. Podemos comenzar.

- He recuperado las fórmulas robadas por Kokutsu- san y se han destruido las copias de las mismas creadas en el laboratorio.

Cojo los pergaminos doblados dentro de mi kimono y los pongo en el suelo, ofreciendoselos a Agasha Takeru- sama.

- Primero, me reuní con Kokutsu- san simulando ser una traidora. Le ofrecí nuevas fórmulas, y acordamos un posterior encuentro para darselas. Un samurai escorpión, presente en la reunión por orden del propio Kokutsu- san y por motivos que desconozco, serviría de mensajero para saber cuando y donde se realizaría la prueba de mi mercancía.
Antes de implicar al samurai escorpión y provocar cualquier problema entre nuestros clanes, le conté que había venido a capturar a Kokutsu- san y adoptó un papel más colaborativo que neutral. Preferiría no dar el nombre de este samurai pues se mostró comprensivo ante mis motivos y quisiera evitarle problemas, pero si me lo pide usted se lo daré.
Falsifiqué una poción para que diera un efecto concreto en el encuentro con Kokutsu- san. Éste creyó que mis productos se acordaban a sus exigencias, así que después del encuentro fijamos una fecha para el próximo encuentro.
Sin embargo, no iba a haber próximo. Un grupo de samurais de nuestro clan lo siguió a su guarida, donde iba a esconder el nuevo botín que le había entregado. Uno de sus perseguidores contactó conmigo después. Conseguí recuperar lo que aquí le ofrezco; el resto de su laboratorio fue calcinado por los samurais.
Kokutsu- san sigue en libertad. Eso es todo.

Arqueé una ceja tras escuchar el relato.

-Magnífico, un resultado perfecto. Habéis realizado un gran trabajo para nuestro clan, y me aseguraré de que obtengáis una recompensa a la altura de dicha tarea. Dejaremos que Yasuki Kokutsu-san continúe en libertad, es más útil así para que los elementos negativos fluyan hacia él, y taparé todo lo relacionado con esa recuperación - tras una pausa, retomé la conversación - ¿estáis al corriente de otros sucesos que están ocurriendo la ciudad?

Ahora no podía dejarme llevar, así que contesté con un tono aburrido:

- Gracias por sus felicitaciones, Agasha Takeru- sama, me siento muy honrada.
Asistí a una reunión Dragón donde se comentaron varios sucesos excluviamente relacionados con nuestro clan, pero no participo activamente en ninguno.

Y mirando hacia el suelo, esperé que decidiera sobre mi futuro.

- ¿Cuantas víctimas ha habido? ¿Alguno de los clanes ha sufrido más de una víctima?

Después de la contestación de Agasha Takeru- sama, añadiría:

- Dejemelo a mí, Agasha Takeru- sama. Solo digame con quién puedo hablar para obtener información y me pondré en camino.